Gracias a este estímulo tuve la oportunidad de
asistir y supervisar el proceso de montaje del proyecto CHORRERAS. Este
proyecto fue pensado y desarrollado desde la exploración, vivencia e
investigación histórica de esta región y específicamente de la Ciudad de
Cuenca. Los recursos otorgados a este proyecto por parte del Ministerio me permitieron
el desplazamiento aéreo de Bogotá a Cuenca, la manutención personal y hospedaje
en esta ciudad por 15 días. Al igual que muchas de las urbes de los Andes es el
agua el recurso principal que ha permitido el desarrollo desde la misma
agricultura, y posteriormente el trazado de la ciudad, y es la misma agua que
se moviliza en los ríos la que también permitió la industria principalmente en
el desarrollo de los Molinos para la harina, pólvora y posteriormente la
generación de energía. Es así como mi propuesta procuraba por destacar el agua
como sustancia fundamental para la vida, como el agente potencial que moviliza
y permite la transformación, pero al tiempo su temporalidad y su transcurrir.
El agua como materia plástica que me permitió construir esta propuesta ligada a
su propia naturaleza.